El alcalde Enrique Galindo Ceballos acusó al Congreso del Estado de no favorecer a la capital potosina en decisiones recientes, mientras impulsa que San Luis Potosí, Soledad de Graciano Sánchez y Cerro de San Pedro asuman la gestión autónoma de sus sistemas de agua
Enrique Galindo Ceballos, alcalde de la capital potosina, expresó su postura a favor de que cada municipio de la zona metropolitana asuma la responsabilidad de su sistema de agua potable, drenaje y tratamiento. En este contexto, el edil destacó la relevancia de las conversaciones con los presidentes municipales de Soledad de Graciano Sánchez y Cerro de San Pedro sobre la posible desaparición del organismo intermunicipal Interapas.
En declaraciones recientes, Galindo subrayó que mantiene una comunicación abierta y constante con Juan Manuel Navarro, alcalde de Soledad de Graciano Sánchez, y Jesús Nava, presidente municipal de Cerro de San Pedro. Estas conversaciones giran en torno a la salida de Soledad del organismo y al futuro de la gestión del agua en la región. “Es un tema que debemos decidir entre los tres, antes de que se nos adelante el Congreso”, puntualizó.
Galindo Ceballos enfatizó que el Congreso del Estado no ha favorecido a la capital en decisiones recientes, lo que refuerza la necesidad de que los alcaldes tomen la iniciativa en este asunto. “Últimamente, el Congreso no ha tratado muy bien a la capital”, declaró con firmeza, dejando entrever su descontento ante situaciones que, desde su perspectiva, han puesto en desventaja a San Luis Potosí frente a otros municipios, en particular con el rechazo a la ley de ingresos 2025 que incluía varios aumentos de impuestos.
El edil subrayó que esta percepción ha motivado su interés por liderar el diálogo sobre la posible desaparición de Interapas, evitando que decisiones cruciales sean tomadas por otras instancias sin considerar plenamente las necesidades de la capital.
Galindo consideró que este es un momento oportuno para tomar decisiones respecto a la gestión del agua, dado que las presas se encuentran llenas y la red hidráulica opera a su máxima capacidad. A pesar de las proyecciones de sequía para el próximo año, la situación actual brinda un margen favorable para realizar una transición organizada y sin mayores afectaciones para los usuarios.
El edil comparó el proceso con una situación familiar compleja: “Esto es como un divorcio y una herencia: hay que definir quién se queda con qué, pero lo esencial es asegurar que el servicio llegue a la gente”.
El alcalde destacó que la autonomía municipal es clave para garantizar la eficiencia en el manejo del agua, pero reiteró la importancia de adelantarse a cualquier intervención del Congreso, que podría complicar los acuerdos entre los municipios.
Por su parte, el alcalde de Soledad de Graciano Sánchez ya ha manifestado en diversas ocasiones la intención de su municipio de abandonar el organismo intermunicipal.