La señal de auxilio ante la violencia de género, un gesto discreto que surgió en 2020, ha demostrado ser una herramienta valiosa para mujeres en situaciones de riesgo.
En lugares como San Luis Potosí, donde la violencia de género es una preocupación constante, la señal de auxilio se convierte en una herramienta crucial. En los primeros meses de 2025, ya se han registrado varios casos de muertes violentas y desapariciones de mujeres, lo que subraya la relevancia de esta señal en la lucha por salvar vidas.
Su principal propósito es permitir a las víctimas solicitar ayuda de manera sutil, sin alertar a su agresor. La clave de su efectividad radica en su capacidad para crear conciencia y fomentar la acción inmediata, como contactar al 911, buscar apoyo especializado y evitar la revictimización.
Este gesto se popularizó durante la pandemia, cuando muchas mujeres se vieron obligadas a convivir en aislamiento con sus agresores. Fue entonces cuando la Canadian Women’s Foundation lanzó la señal #SignalForHelp, un medio visual de resistencia que se difundió rápidamente en redes sociales.
La señal consiste en levantar la mano a la altura de la barbilla, abrirla, colocar el pulgar en el centro y luego cerrar la mano, cubriendo el pulgar con los dedos. De esta manera, la persona está comunicando que se encuentra en una situación de peligro sin que su agresor lo note. Este gesto se ha utilizado eficazmente en situaciones cotidianas, como videollamadas o en espacios públicos, y ha demostrado su importancia en eventos recientes, como el concierto de Alicia Villarreal en Michoacán a principios de 2025.
La sencillez y claridad de este gesto lo han convertido en uno de los mecanismos más utilizados de defensa y prevención en los últimos años. Aunque parezca una acción simple, su importancia radica en el contexto en el que se utiliza y en la conciencia colectiva sobre su significado.