Escrito por Angelique Salazar.
La llegada de una tercera planta armadora de vehículos a México ha generado una competencia cerrada entre los estados del Bajío; San Luis Potosí y Guanajuato.
En la carrera por atraer la próxima gran inversión automotriz en México, San Luis Potosí y Guanajuato se posicionan como los principales contendientes, pues ambos estados han sido protagonistas del crecimiento del clúster automotriz, pero todo parece indicar que San Luis Potosí tiene una ventaja en las negociaciones para albergar una tercera armadora, y a pesar de que Guanajuato tiene un historial sólido en la industria, varios factores sugieren que San Luis Potosí es la opción más probable.
De acuerdo con declaraciones del diputado federal Juan Carlos Valladares, ha señalado que este estado tiene una alta probabilidad de ser seleccionado debido a varios factores.
San Luis Potosí ha demostrado ser un buen lugar para las inversiones automotrices, pues se ha consolidado como uno de los principales centros industriales de México, atrayendo grandes inversiones de marcas reconocidas como BMW y General Motors, su ubicación geográfica es una de sus mayores fortalezas, ya que se encuentra en un cruce estratégico entre el norte y el centro del país, lo que facilita la logística para el transporte de vehículos y componentes tanto dentro de México como hacia mercados internacionales.
La conectividad a través de la carretera 57, que va desde la Ciudad de México hasta la frontera con Estados Unidos, representa una ventaja competitiva para cualquier armadora que busque eficiencia en distribución y además, San Luis Potosí ha invertido fuertemente en su infraestructura industrial.
El crecimiento de parques industriales de alta calidad, ha venido acompañado de un desarrollo en la capacitación de la mano de obra, lo que permite a las empresas acceder a talento especializado, ya que universidades y centros técnicos locales han respondido a la demanda del sector automotriz, formando profesionales con las habilidades necesarias para trabajar en estas plantas.
Sin embargo, quizá las desventajas que podría presentar San Luis Potosí es que podría generar mucho empleo y llegar a quedar como un estado chico, asimismo la rápida expansión de la industria automotriz podría superar la capacidad actual en términos de agua y energía, lo que requeriría inversiones adicionales en estos sectores.
Otro contra podría ser la competencia por la mano de obra, si bien el estado cuenta con un buen número de trabajadores capacitados, el crecimiento constante del sector podría generar una mayor demanda de talento, lo que aumentaría los costos salariales y podría afectar a empresas más pequeñas.
Por otro lado, Guanajuato sigue siendo un fuerte contendiente, ya que este estado ha consolidado un clúster automotriz robusto con la presencia de armadoras como General Motors, Toyota y Mazda, lo que permite a nuevas empresas integrarse rápidamente en una cadena de suministro establecida.
Asimismo la infraestructura industrial y logística de Guanajuato, con parques industriales de primer nivel y un aeropuerto internacional en León, también es una ventaja.
Sin embargo, Guanajuato también podría presentar algunas desventajas como la saturación del mercado laboral, pues C on tantas empresas automotrices instaladas en el estado, la competencia por trabajadores capacitados es feroz, lo que podría dificultar la contratación de personal para una nueva planta.
Además de que el estado sufre de una grave escasez de agua, un recurso vital para la industria automotriz. La instalación de una nueva planta podría exacerbar este problema y generar costos adicionales para las empresas.
En conclusión, San Luis Potosí se perfila como la opción más probable para la instalación de esta tercera armadora, gracias a su ubicación estratégica, infraestructura en expansión y el apoyo decidido del gobierno, y que a pesar de algunas desventajas, su potencial de crecimiento y su capacidad para atraer inversión extranjera lo posicionan como el mejor destino.
Guanajuato, aunque cuenta con un ecosistema automotriz consolidado, enfrenta mayores desventajas en términos de recursos y saturación laboral. La decisión final dependerá de los factores que priorice la empresa automotriz, pero es claro que San Luis Potosí está a la vanguardia en esta competencia.