Cientos de potosinos marcharon en defensa del Poder Judicial, rechazando la reforma que busca modificar la elección de jueces y magistrados
El pasado domingo 8 de septiembre, cientos de ciudadanos de San Luis Potosí tomaron las calles para manifestarse en contra de la reforma judicial impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador. La concentración, convocada por los colectivos Potosinos con Valor y el Frente Cívico Nacional, partió del Jardín de Tequisquiapan y culminó en el Congreso del Estado, en un recorrido que reunió a diversas organizaciones sociales y trabajadores del Poder Judicial.
Desde tempranas horas, el Jardín de Tequisquiapan se convirtió en el punto de encuentro para los manifestantes, quienes llevaban pancartas y mantas con frases como “Juez imparcial tiene carrera judicial” y “Que todo el que se queje con justicia, tenga un tribunal que lo escuche”. A las 11 de la mañana, comenzó la marcha que avanzó por la avenida Venustiano Carranza, una de las principales vialidades de la capital potosina, hasta llegar a la Plaza Fundadores. Posteriormente, el contingente se dirigió hacia el Congreso local, donde hicieron una pausa frente al edificio legislativo para expresar su rechazo a la reforma.
Entre los asistentes destacaron estudiantes de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, trabajadores del Poder Judicial tanto a nivel estatal como federal, así como miembros de diversas organizaciones civiles. José Alberto Meade, uno de los principales organizadores del evento y miembro del colectivo Potosinos con Valor, encabezó la movilización y tomó la palabra frente a los manifestantes, señalando que la reforma busca socavar la autonomía del Poder Judicial.
“Quieren terminar con el único poder que le ha puesto freno a las decisiones arbitrarias, como el Tren Maya”, declaró Meade. Además, recalcó la importancia del sistema judicial para garantizar derechos fundamentales, como el acceso a medicamentos y tratamientos de alto costo a través de amparos. Para Meade, la propuesta del gobierno es un intento por concentrar más poder en el Ejecutivo y debilitar la independencia del Poder Judicial.
A lo largo del recorrido, se escucharon consignas que exigían a los legisladores locales y federales que no permitan la aprobación de la reforma. Dirigiéndose directamente a los senadores Ruth González Silva, Gilberto Hernández Villafuerte y Verónica Rodríguez Hernández, los manifestantes les pidieron no ceder ante la presión política y votar en contra de cualquier modificación que vulnere la separación de poderes.
A diferencia de otras marchas realizadas en semanas anteriores en distintas partes de México, la movilización en San Luis Potosí destacó por la notable participación de ciudadanos de a pie, quienes se unieron al llamado de los colectivos organizadores. Aunque en otras ocasiones las protestas habían contado con una presencia más acotada de personal del Poder Judicial, esta vez la marcha se vio fortalecida por la asistencia de un mayor número de sectores sociales.
La manifestación culminó con un llamado a la unidad y a la defensa de las instituciones democráticas. “Esto no es solo una protesta, es un México que defiende sus instituciones”, concluyó Meade, enfatizando la importancia de mantenerse informados y activos en la lucha por preservar el estado de derecho.