Tras la salida de Domenéc Torrent del Atlético de San Luis iniciará nuevamente con la tarea de armar un equipo competitivo.
La salida del estratega español del equipo potosino dejó un mal sabor de boca para la afición potosina, y no lo digo solo por decir basta con que se de una vuelta a las recientes publicaciones del equipo la hinchada está harta, de empezar de nuevo desde cero.
Con la salida de Torrent se dejó en claro lo que le venía contando, el futbol potosino necesita un proyecto sólido un proyecto a futuro, y no empezar desde cero cada torneo, porque esta noticia dejó ver que a la directiva potosina lo último que le interesa es el futbol.
Al revisar lo ocurrido en el pasado, es evidente la falta de interés de crear un buen proyecto deportivo pues cuando André Jardine tomó las riendas del equipo potosino, parecía que por fin se estaba construyendo un proyecto estable.
El técnico brasileño comenzaba a formar un buen plantel, pero, como ha sucedido antes, la falta de refuerzos competitivos terminó por frenar su trabajo.
Aunque no se confirmó oficialmente, todo apunta a que la razón de su salida fue la escasa inversión por parte de la directiva. Poco después de dejar el club, Jardine logró consagrarse como tricampeón con el América, dejando claro que los entrenadores no son el verdadero problema.
En 2025, la historia parece repetirse. Un nuevo entrenador extranjero llega al equipo y, pese a contar con recursos limitados, logra hacerlo competitivo y darle un nuevo impulso.
Sin embargo, una vez más, la directiva deja en evidencia sus prioridades y el armar un plantel competitivo no es una de ellas, ¿Que hace?, opta por vender a los jugadores que muestran buen rendimiento.
Lo mismo ocurrió con el técnico español, quien demostró tener gran capacidad, pero terminó alejándose ante la aparente falta de compromiso del área deportiva, que parece enfocarse más en lo económico que en lo deportivo.
Así que de nueva cuenta la historia se vuelve a repetir…