Escrito por Humberto Torres.
Los bomberos siguen en enfrentado un entorno laboral desfavorable pese haber llegado a un acuerdo con el patronato para mejor su condición salarial.
A más de seis meses de su manifestación, los bomberos metropolitanos de San Luis Potosí siguen sin recibir el apoyo prometido por el patronato.
Desde agosto del 2024 los bomberos habían exigido mejores condiciones laborales.
Los bomberos exigían cuatro demandas principales para mejorar sus condiciones laborales: un salario justo, acceso a seguro médico para cubrir gastos mayores, seguro de vida para proteger a sus familias, y un cumplimiento estricto de la jornada laboral establecida por la ley, que actualmente es vulnerada al trabajar hasta 96 horas a la semana, cuando el máximo permitido es de 48 horas.
A pesar de haber firmado un convenio en enero que contemplaba mejoras salariales y prestaciones, nada se ha materializado.
Según Francisco Portillo, presidente de la mesa directiva del cuerpo de bomberos, el patronato no ha valorado la labor que desempeñan los bomberos ante las emergencias y desconoce por completo el trabajo que realizan en cada situación de crisis.
Sin embargo, hasta el momento solo se ha cumplido la jornada laboral, y el aumento salarial ha sido de solo 34 pesos diarios, lo que consideran injusto.
“No nos ha dado ninguna respuesta del seguro de vida, por ahí solo dijeron que nos mandarían un ajustador para crecer costos pero nada. Nuestro salario digno no ha sido aumento de manera justa, solo nos aumentaron 34 pesos diarios que solo es el 5 por ciento para ellos esto es lo que valemos”, señaló Portillo.
A pesar de las deficientes condiciones laborales y la falta de reconocimiento, los bomberos potosinos continúan brindando servicios de alta calidad, demostrando su profesionalismo y compromiso en situaciones críticas, como lo evidenciaron en su efectiva respuesta al mega incendio en la avenida Valentín Amador.
“Nosotros ayer estuvimos trabajando de la mejor manera, exponiéndonos, algunos de los compañeros sufrieron por la radicación, se deshidrataron, nuestros camiones se dañaron por la radicación, pero los camiones se reparan nosotros no. Mejor la gente nos estuvo apoyando llevándonos víveres, fruta y agua, pero el patronato no”, finalizó.