Un patito murió atropellado dentro del Parque Tangamanga I por un conductor que huyó del lugar. El hecho, ocurrido en una zona con límite de 20 km/h, ha desatado indignación en redes sociales y exigencias de mayor conciencia y seguridad para proteger la fauna local.
Un trágico suceso ha conmocionado a la comunidad de San Luis Potosí luego de que un patito fuera atropellado dentro del Parque Tangamanga I, uno de los espacios naturales más emblemáticos de la región. El hecho, ocurrido en un área donde la velocidad máxima permitida es de 20 km/h, ha desatado una ola de indignación en redes sociales y ha puesto en evidencia la falta de responsabilidad de algunos visitantes hacia la fauna que habita en el parque.
De acuerdo con testimonios y publicaciones en redes sociales, el conductor responsable del atropello no solo no se detuvo para auxiliar al animal, sino que huyó del lugar. Un amigo del patito intentó reanimarlo, pero los esfuerzos fueron en vano. Las imágenes compartidas en plataformas digitales muestran al pequeño animal sin vida en el pavimento, rodeado de otros patos.
El incidente ha generado un intenso debate sobre la necesidad de reforzar las medidas de seguridad dentro del parque. Muchos internautas han cuestionado cómo es posible que, en un espacio diseñado para la convivencia con la naturaleza, ocurran este tipo de accidentes. “Es inaceptable que no se respete la vida de los animales en un lugar que debería ser un refugio para ellos”, expresó un usuario en redes.
Además, han surgido denuncias anónimas que apuntan a que el conductor involucrado sería un joven identificado como “Junior de las Lomas”, quien supuestamente habría confesado que atropelló al patito por diversión y que lo volvería a hacer porque considera que no habrá consecuencias para él. Estas afirmaciones, aunque no han sido confirmadas oficialmente, han exacerbado la indignación de la comunidad, que exige justicia y acciones concretas por parte de las autoridades.
El suceso ha dejado en evidencia la necesidad de que las autoridades responsables del parque refuercen la vigilancia y promuevan una cultura de respeto hacia la naturaleza. Mientras tanto, la comunidad espera que este lamentable hecho sirva como un llamado de atención para que todos los visitantes asuman su responsabilidad al compartir espacios con la vida silvestre.