La Semana Santa es una esperanza para los negocios dedicados a la prestación de servicios en San Luis Potosí, pues se estima que aunque este año por segunda ocasión consecutiva no habrá procesión del silencio ni agenda cultural y deportiva en este período vacacional, sí habrá turismo regional.
La Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados, a través de su presidente informó que se espera alcanzar un repunte en ventas de entre un 50 y 60 por ciento, en comparación con los últimos tres meses que no han sido tan favorecedores para este tipo de negocios.
“Viene un repunte, la realidad es que el semáforo amarillo nos da un oxígeno increíble y la gente vuelve a salir un poco más, el mismo consumo local es más importante, la gente se libera un poco pues ha estado encerrada mucho tiempo y busca una oportunidad para tener estos espacios”, expresó Eduardo Kasis Chevaile, presidente local de la Canirac.
El líder restaurantero confío en que el sector turístico logrará reactivarse dando un primer paso con visitantes locales y regionales, pues recordó que ha sido un año en el que muchas familias no han salido y aprovecharán este período para realizar paseos en corto, por lo que se estima recibir visitantes principalmente de Estados vecinos.